¿Es lo mismo el Bad SEO que el Black Hat SEO? Técnicamente no (aunque desaprobamos ambas prácticas con la misma vehemencia)
El SEO se puede hacer de dos maneras: bien, y mal. Dentro del SEO mal hecho, a veces difícil distinguir si el Bad SEO es lo mismo que el Black Hat SEO.
Empezamos por lo básico. Optimizar contenido para que se ajuste lo máximo posible a ciertos criterios es lo que conocemos como SEO. Dichos criterios no son aleatorios, sino los que los motores de búsqueda (Google, fundamentalmente) determina como factores de posicionamiento.
El posicionamiento en buscadores de una página web depende de cientos de factores que Google tiene en cuenta para determinar el posicionamiento de un contenido. También sabemos (porque los pobres ingenieros de Search están hartos de decirlo), que la intención última de esos criterios es tener una atmósfera de contenido de tanta calidad como sea posible.
El juego de la optimización es que, si bien sabemos algunos de los parámetros más importantes que Google tiene en cuenta a la hora de rankear páginas, no los sabemos todos (son cientos y cientos). Google nunca termina de revelar el funcionamiento interno de Search, y tienen un buen motivo para ello.
BH SEO: una lacra colectiva
Se conoce como Black Hat SEO al conjunto de tácticas y estrategias destinadas a engañar a los crawlers de Google para que posicionen contenido de baja calidad, engañoso o directamente inexistente.
Enseñar una página diferente a los buscadores y a los usuarios, por ejemplo, es una práctica de Black Hat SEO. También lo es insertar texto oculto. Se recomienda un mínimo de 300 palabras para las entradas y 900 para las páginas estáticas, y hay páginas que cumplen con esos criterios de posicionamiento, pero como el contenido no es original, se oculta a los usuarios pintando la fuente del mismo color del fondo.
Los motores de búsqueda son cada vez más eficaces a la hora de identificar técnicas de Black Hat SEO, algunas de las cuales suelen ser bastante obvias
La compraventa de links, la duplicación de contenido, los comentarios spam… el Black Hat SEO no sólo tiene el objetivo de posicionar de forma ilícita, sino de atacar el posicionamiento de otros sites compitiendo por el mismo nicho o las mismas keywords.
Las tácticas del Black Hat SEO son deliberadas, y están diseñadas en base a lo que vamos averiguando sobre factores de posicionamiento. Por eso Search es tan celoso con respecto a las complejidades específicas de sus criterios: cuanto más sepamos al respecto nosotros, el público general, también sabrán los usuarios que hacen un uso más que cuestionable de los motores de búsqueda.
Bad SEO: una pequeña vergüenza individual
Podríamos decir que la diferencia en Bad SEO y Black Hat SEO radica más que nada en la intencionalidad de las prácticas. El Bad SEO consiste fundamentalmente en un mal empleo de técnicas de optimización de contenidos.
De hecho, uno de sus mayores peligros es que todos los que nos dedicamos al marketing digital somos susceptibles de incurrir en prácticas del Bad SEO de forma inadvertida, especialmente al principio.
En esencia, el Bad SEO (o Mal SEO, directamente) consiste en no haber entendido del todo en qué consiste la optimización de contenido, o en haberlo entendido mal. No seguir una estrategia, o no cumplir con los requisitos básicos de SEO, no solamente resulta en un peor resultado en los SERP, sino que también puede resultar en un empobrecimiento del propio contenido.
Publicar contenido desactualizado, redactar pensando en los algoritmos y no en los lectores, no hacer keyword research, dejar en blanco las metadescripciones o no prestar atención a la experiencia de usuario son algunas de las prácticas más típicas del Mal SEO.
Como ya hemos contado en otras ocasiones, los requisitos SEO deben de ser utilizados como una guía, incluso creativa, para la redacción y edición de contenido. Si tienes un proyecto web y no sabes cómo mejorar su posicionamiento, para eso está Onion Studio: tu agencia de marketing digital en Málaga (y en todas partes).
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